Los negocios no son cosa de juego, aun cuando el juego sea el negocio. Sin embargo, el proceso de jugar tiene elementos aplicables al emprender en una microempresa o una empresa emergente (startup). De eso trata la gamificación: de usar esos elementos divertidos, convincentes e interactivos de los juegos en los negocios para optimizar el rendimiento del personal y crear un ambiente de trabajo más productivo. ¡Conoce aquí todo al respecto!
¿Qué es la gamificación y cómo aplicarla en los negocios emergentes?
La gamificación es, básicamente, el proceso de agregar juegos o elementos lúdicos a una tarea o responsabilidad. Esto con el objetivo de fomentar una mayor participación de los miembros de una empresa. Como resultado, se podría tener un personal más enfocado, motivado y leal. Además de que esto:
- Mejoraría los indicadores de eficiencia y productividad.
- Impulsaría el rendimiento de la empresa.
Sin embargo, si el negocio apenas está iniciando, hay que evitar el crear objetivos basados en el deseo de implementar esta herramienta. Ten presente que esta debe alinearse a los objetivos de la empresa y no al revés. Mira a continuación algunas áreas clave para aplicarla:
- Marketing: para obtener nuevos clientes en apps y sitios web.
- Capacitación: para mejorar el aprendizaje.
- Reclutamiento: para probar las calificaciones de un candidato.
- Ventas: para aumentar la tasa de concreción de ventas y fidelizar a los clientes.
- Gestión de la salud: para mejorar el estado físico y mental de los empleados.
- Networking: para estimular la participación de los colaboradores de las redes de trabajo.
El paso a paso infalible
Ahora bien, la mejor herramienta para aplicar la gamificación es el design thinking. Veamos entonces los pasos que necesitas implementar:
- Entiende a tus jugadores (empleados). Realiza entrevistas y observaciones para comprender el comportamiento de tus jugadores; es decir, su forma de pensar y actuar.
- Define los criterios rectores. Establece los parámetros que quieres alcanzar al implementar el juego. Así los criterios rectores marcarán las fronteras del juego para no desviarse del objetivo de la empresa.
- Cómo se juega el juego y su mecánica. Un juego es justo cuando las reglas son claras y todos las conocen y aceptan. Es importante que desarrolles un guion acorde con la naturaleza de tu negocio.
- Prueba en baja, media y/o alta fidelidad. Una vez desarrollado tu prototipo, realiza pruebas para conocer su efectividad y aplicar correcciones si hicieran falta. De acuerdo con el nivel de detalle del prototipo, la fidelidad será de baja, media o alta.
- Implementación y monitoreo. Inicia una campaña informativa previa al lanzamiento del juego. Para eso, necesitarás realizar una evaluación constante. Apóyate en indicadores clave (KPI) de gestión para hacer el seguimiento y orientar tus estrategias futuras.
¡Aprende jugando! El uso de técnicas de ludificación como parte de la capacitación de los empleados es efectiva. Así la capacitación es mucho más agradable.
Concursos en la empresa
Organiza competencias de disfraces durante Halloween o una competencia de cocina. La idea es darles a los empleados un descanso de las tareas diarias y mejorar la moral. Así volverán al trabajo sintiéndose renovados y motivados.
Barras de progreso para tareas diarias
Puedes asignar puntos a tus empleados por completar una determinada tarea en función de los datos proporcionados y la complejidad de los datos involucrados.
Aplicar la gamificación en las empresas emergentes podría generar ambientes de trabajo realmente productivos para ganar en eficiencia, productividad y rentabilidad. Así jugar puede ser una actividad realmente beneficiosa. ¡Juega y gana!
